El Partido Demócrata (PD) de Corea del Sur solicitó este miércoles la renuncia del presidente Yoon Suk-yeol. La exigencia surge tras la breve imposición de la ley marcial, que fue anulada por la Asamblea Nacional. Según el PD, esta medida constituye una «violación de la Constitución».
El PD, que cuenta con la mayoría parlamentaria, calificó la decisión de Yoon como un «acto grave de rebelión» y anunció que iniciará un proceso de destitución si el mandatario no dimite voluntariamente. La ley marcial fue decretada con el argumento de proteger el «orden constitucional» de supuestas actividades «anti-estatales».
El contexto del anuncio está relacionado con tensiones políticas. El PD aprobó recientemente presupuestos generales para 2025, junto con mociones de destitución contra altos funcionarios, decisiones que no contaron con el apoyo del Partido del Poder Popular (PPP) de Yoon.
Han Dong-hoon, líder del PPP, pidió al presidente explicaciones sobre su decisión y exigió la destitución del ministro de Defensa, Kim Yong-hyun. «Queremos ofrecer disculpas a los ciudadanos por esta situación desastrosa», afirmó Han, en declaraciones recogidas por la agencia Yonhap.
La oficina presidencial anunció la postergación de una reunión pública convocada por Yoon, en la que se esperaba que abordara esta controversia. El evento marcaría su primera aparición tras la revocación de la ley marcial.
RFI