19 Oct
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 Bogotá, 19 de octubre de 2024. 

 En un esfuerzo por reducir la influencia del narcotráfico en las regiones más afectadas por la violencia y la economía ilegal, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció  la compra directa de las cosechas de coca a los campesinos del corregimiento de El Plateado y del cañón del Micay, en el departamento del Cauca en el sur oeste de Colombia.


Este anuncio, parte de una nueva estrategia gubernamental, tiene como objetivo socavar el poder de los grupos criminales y facilitar la transición hacia actividades productivas legales. El anuncio tuvo lugar durante la firma del Pacto por la Democratización del Crédito Solidario, un acuerdo clave que busca fortalecer el acceso a créditos en zonas rurales donde la banca tradicional no tiene presencia. 

El pacto está diseñado para ofrecer alternativas de financiación a las comunidades que dependen del cooperativismo como única fuente de crédito. “Debemos cambiar los métodos para cambiar la realidad. La compra de estas cosechas es una estrategia para quitarle terreno al narcotráfico, mientras impulsamos una economía lícita que beneficie directamente a los campesinos”, expresó Petro durante el acto en la capital colombiana. El presidente explicó que esta medida responde a la urgencia de reducir el control territorial de los carteles internacionales sobre zonas como El Plateado, la cual, según el mandatario, se había convertido en un centro neurálgico del tráfico de cocaína. 

Carteles de México, Europa y África se disputaban el control de esta región, afirmó Petro, quien destacó que la reciente operación militar en la zona permitió retomar el control de este enclave estratégico. 

Nuevas políticas para apoyar a las comunidades rurales 

Como parte de la estrategia integral del gobierno, Petro firmó también la Directiva Presidencial 08 de 2024, cuyo objetivo es mejorar la coordinación entre las distintas entidades estatales para facilitar la transición de las comunidades rurales hacia actividades lícitas.

 Esta directiva, enmarcada en la Política Nacional de Drogas 2023-2033, incluye iniciativas como la promoción de la agroindustrialización, la concesión de créditos, la titulación de tierras y el fomento de negocios verdes.

 “El propósito es que las comunidades rurales que actualmente dependen de economías ilegales cuenten con herramientas reales para su desarrollo sostenible”, comentó el mandatario. Asimismo, subrayó que estas medidas están alineadas con los compromisos adquiridos en el Acuerdo Final de Paz de 2016, que busca poner fin a décadas de conflicto armado en las zonas más afectadas por el narcotráfico. 

Acceso al crédito: clave para el desarrollo rural El Pacto por la Democratización del Crédito Solidario, firmado este mismo día, tiene como fin crear una hoja de ruta clara para expandir el acceso al crédito en zonas marginadas, fomentando el modelo de economía solidaria. Según la Presidencia, este pacto contempla un cronograma de acciones para facilitar la colocación de créditos asociativos, esenciales para impulsar la economía rural y fortalecer las cadenas productivas legales en estas zonas. 

Con esta estrategia, el gobierno de Petro busca abordar de manera estructural el problema del narcotráfico, ofreciendo a las comunidades campesinas alternativas viables que permitan desligarse de las economías ilegales, mientras se promueve el desarrollo económico sostenible en todo el país.



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