El país caribeño está sumido en una crisis de violencia exacerbada tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse, en julio del 2021.
El horror extremo volvió a azotar este mes Puerto Príncipe, la capital de Haití, con una matanza que terminó con la vida de 180 personas en Cité Soleil, la mayor comuna de chabolas del país, asfixiada por el crimen organizado que desde hace años es amo y señor del territorio.
Monel Felix, también conocido como 'Micanord Altes' y líder de una banda criminal, ordenó la masacre después de que un sacerdote vudú, al que que pidió consejo sobre la enfermedad de su hijo, acusara a unos ancianos de la zona de dañar mediante brujería al niño, que falleció.
La ira de Felix desató un baño de sangre en el barrio Wharf Jérémie, en Cité Soleil, y dejó una nueva página de horror en la ya larga historia de violencia que azota a Haití.
El asesinato masivo en Wharf Jérémie tuvo lugar solo dos meses después de otra matanza llevada a cabo por la banda 'Gran Grif' (Grandes Garras), considerada la más grande y poderosa del departamento de Artibonito.Liderada por Luckson Elan, sancionado por la ONU por su participación en graves violaciones de derechos humanos, esa masacre dejó un saldo de 115 muertos en Pont Sondé, aproximadamente 100 kilómetros de la capital.
Esa misma banda, responsable de numerosos actos de violencia, asesinó la semana pasada a 20 personas mientras dormían en su casa la región de Artibonite, en la comuna Petite Rivière. Detrás de esta violencia, que tiene sumido al país en una crisis humanitaria, con miles de desplazados, se calcula que hay cerca de 300 bandas, que controlan el 80 % de la capital, Puerto Príncipe y buena parte del país.
Según datos de la ONU, este último año la violencia pandillera ha dejado 5.000 muertos, en un país con poco más de 11,5 millones de habitantes. La crisis humanitaria también es alarmante, con decenas de miles de desplazados forzados a huir de sus hogares.
Según la organización Global Center Responsibility to Protect, la poderosa coalición de bandas 'Viv Ansanm (Vivir Juntos)', y a la que pertenece el grupo de 'Micanord Altes', lanzó desde finales de febrero ataques coordinados en toda la capital con el objetivo de expandir su territorio.
La coalición se formó en 2023, tras un pacto entre el exoficial de policía Jimmy Chérizier, alias 'Barbecue', jefe de la federación de pandillas G-9 y Familia y Aliados, y la pandilla de G-Pep, con el objetivo de derrocar al gobierno del entonces primer ministro, Ariel Henry, quien finalmente renunció desde el exilio el pasado mes de marzo. También figuran las bandas Terre Noir y Kokorat San Ras.
RT