El Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, enfatiza que el progreso de Irán ha enojado y frustrado a aquellos que tienen malas intenciones hacia el país.
“El progreso del país ha enfurecido y frustrado a los opositores de Irán, si bien ciertamente existen debilidades en áreas como la económica que sin duda deben abordarse”, ha afirmado durante una reunión con altos comandantes de las Fuerzas Armadas iraníes este domingo.
El Líder de la Revolución Islámica ha considerado que las Fuerzas Armadas son la defensa de la nación y el refugio del pueblo contra cualquier agresor, y enfatizado la necesidad de continuar mejorando al máximo la preparación y las reservas materiales y programáticas para cumplir con esta responsabilidad nacional.
En cuanto a la preparación material de las Fuerzas Armadas, ha destacado el aumento de sus capacidades de armamento y la mejora de sus capacidades organizativas y de subsistencia. “Además de la preparación material, la preparación programática —es decir, la creencia en el objetivo y la misión y la certeza en la legitimidad del camino— es extremadamente importante, y existen esfuerzos hostiles para distorsionarla”, ha subrayado.
El ayatolá Jamenei ha considerado que la naturaleza islámica e independiente del Irán islámico es el factor que despierta la hostilidad hacia el país. “Lo que despierta la sensibilidad del enemigo no es el nombre de la República Islámica, sino la decisión del país de ser musulmán, independiente y tener su propia identidad, sin depender de otros para su dignidad.
Esto es lo que despierta su ira”, ha agregado.
Ha resaltado que la República Islámica está experimentando un impulso y un progreso significativos. “Por supuesto, hay algunos problemas económicos tangibles que deben resolverse, pero no debemos confundir las cosas e ignorar el asombroso progreso que ha impresionado incluso a nuestros enemigos”, ha añadido.
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HispanTV