Funcionarios ucranianos se han atribuido la responsabilidad del asesinato del general de Ígor Kirílov, jefe de la división de armas químicas del Ejército ruso.
Una fuente del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) reveló que el asesinato de Kirílov, jefe de las Tropas de Defensa Radiológica, Química y Biológica del Ejército de Rusia, se ha ejecutado como una “operación especial” este martes.“La eliminación del teniente general Ígor Kirílov (...) es una operación especial del SBU”, ha afirmado la fuente.
El asesinato de alto perfil ha ocurrido la madrugada de este martes en Moscú cuando un dispositivo explosivo improvisado, inteligentemente oculto dentro de un scooter estacionado, ha explotado de repente cuando Kirílov y su ayudante salieron de un edificio residencial en Ryazansky Prospekt, aproximadamente a 7 kilómetros del Kremlin.
El Comité de Investigación de Rusia ha confirmado el devastador impacto de la explosión, que se ha llevado las vidas de Kirílov y su asistente y ha destrozado las ventanas de un edificio cercano.
Además, el comité ha anunciado la apertura de una investigación criminal sobre el incidente y ha detallado la naturaleza de la explosión, que fue equivalente en potencia a unos 200 gramos de TNT. Según los informes de la agencia de noticias estatal rusa TASS, el dispositivo explosivo fue operado a distancia.
El expresidente ruso y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev, ha advertido que los dirigentes ucranianos pronto se enfrentarán a una “venganza inminente” por el asesinato del general ruso de alto rango.
“Al darse cuenta de la inevitabilidad de su derrota militar, lanza ataques cobardes y despreciables en ciudades pacíficas”, ha señalado.Por su parte, el vicepresidente de la Cámara Alta del Parlamento ruso, Konstantín Kosachev, ha expresado su conmoción y pesar por el incidente, calificando la pérdida de “irreparable” y ha prometido que los perpetradores serán llevados ante la justicia. Ha subrayado la necesidad de castigar a los “asesinos” sin piedad.
La portavoz de la Cancillería de Rusia, María Zajarova, ha elogiado en su canal de Telegram a Kirílov, por dedicar muchos años de su vida a “desenmascarar los crímenes de los anglosajones: las provocaciones de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) con las armas químicas en Siria, las manipulaciones del Reino Unido con sustancias químicas prohibidas y las provocaciones en Salisbury y Amesbury, las actividades mortíferas de los laboratorios biológicos de EE.UU. en Ucrania y mucho más”.
“Trabajaba sin miedo. No se escondía detrás de otros. Iba a cara descubierta. Por la patria, por la verdad”, ha escrito la vocera.Su muerte se realiza un día después de que los fiscales ucranianos lo acusaran de ordenar el presunto uso de armas químicas prohibidas en la guerra de Ucrania.El Kremlin calificó de “infundadas” las acusaciones de uso de cloropicrina.
El general había enfrentado sanciones de países como el Reino Unido, Canadá y Nueva Zelanda antes de su muerte.El asesinato de Kirílov ha intensificado el ya de por sí grave conflicto entre Ucrania y Rusia.
Rusia lanzó una operación militar especial en Ucrania en febrero de 2022, en parte para evitar la expansión de la OTAN hacia el este, después de advertir que la alianza militar liderada por Estados Unidos estaba siguiendo una “línea agresiva” contra Moscú.
HispanTV