El reclamo masivo del día de ayer solo fue, junto con la abrupta subida del valor del dólar y las tasas de interés, un hecho emergente de la crítica situación educativa en el país monitoreado nuevamente por el FMI. Pérdida de poder adquisitivo, bajos salarios, falta de inversión edilicia y ajustes en el finaciamiento para becas de investigación fueron las demandas más vistas y oídas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
