La estocada final del gobierno sirio a las milicias rebeldes de la zona sur de ese país tiene como contrapartida el retiro de los Cascos Blancos. Llamativamente la situación humanitaria parecería no importarle a esta organización en acuerdo con los mandatos regulatorios de las Naciones Unidas. ¿Llamativo, no? El llamado desde el Reino Unido catapultará a estos «recursos humanos» por la propia Unión Europea, territorio fuerte de una OTAN cada vez más desorientada. ¿Casualidades o causalidades?
