Se fracturó la anglósfera con la batalla titánica de Facebook y Australia debido al proyecto de ley que obliga a remunerar los contenidos de noticias de los multimedia.
Google optó por arreglarse con News Corp de Rupert Murdoch. Los gigantes del Big Tech de Valle del Silicio también se fracturan con el apoyo de Microsoft al «periodismo independiente».
Un proyecto de ley en Australia, que obligaría a las plataformas a retribuir a los multimedia locales con alcance global, llevó a que Facebook, un gigante del Big Tech, a tomase severas represalias que impiden la publicación de los contenidos informativos de los afectados.
Facebook anunció en su blog la drástica medida: «Enfrentamos una opción desagradable: intentar conformarnos a una ley que ignora las realidades de la relación (entre la red y los editores), o bien cesar de autorizar los contenidos informativos de nuestros servicios en Australia. Con el corazón pesado, escogimos la segunda opción«.
Australia no es un país cualquiera dentro de la anglósfera: cuenta con una superficie de 7,7 millones de km2, con casi 26 millones de habitantes, forma parte del G20 y ostenta el treceavo lugar del ranking del FMI detrás de Brasil y antes que España con un PIB nominal de 1,33 billones de dólares.
El proyecto de ley de Australia —Media Bargaining Law— requiere que las plataformas retribuyan a las fuentes de noticias para exhibir su contenido: fue aprobada en la Cámara de Representantes la noche del 17 de febrero y será probablemente aprobada la semana entrante por el Senado.
En contraste a la posición vigorosa de Facebook, Google —que ostenta el 95% de las búsquedas por internet en Australia— optó por acuerdos con los grupos mediáticos que incluyen al poderoso News Corp del polémico Rupert Murdoch.
Aquí lo relevante es que 5 de los principales giga-bancos accionistas institucionales de News Corp son los mismos que los de Facebook.
The West Australian reporta que también han sido afectados otros multimedia de la anglósfera: CNN, BBC, The Guardian, New York Times y hasta sitios de agencias del Gobierno de Australia, universidades y centros de emergencia.
¿Cómo reaccionará la Unión Europea, que de por sí es muy crítica del oligopolio del Big Tech del GAFAM/Twitter?
¿Cómo reaccionará la huérfana digital de Latinoamérica?