El líder del movimiento Ansar Allah de Yemen, Abdul-Malik al-Houthi, señala que la brutalidad y criminalidad de los grupos takfiríes y terroristas en la región costera de Siria es un diseño de Estados Unidos e "Israel".
"Los crímenes cometidos por los grupos terroristas y takfiríes en Siria son condenables y deben ser rechazados por todos", expresó el líder del movimiento Ansar Allah de Yemen, Abdul-Malik al-Houthi.
Al comentar sobre los recientes acontecimientos en la costa siria, Al-Houthi señaló en un discurso televisado que "comparten la responsabilidad de los crímenes de estos grupos terroristas aquellos que los patrocinan y apoyan financieramente, así como quienes les brindan respaldo político y militar".
En esa línea, indicó que los takfiríes y terroristas en Siria prestan un gran servicio a "Israel" y Estados Unidos al desgarrar el tejido social de la nación.
Conforme a sus palabras, Washington y "Tel Aviv" buscan presentarse cada uno como el salvador y protector del pueblo sirio.
"La brutalidad y criminalidad de los grupos takfiríes y terroristas es un diseño estadounidense, israelí, sionista y judío; ellos los crearon y los prepararon para ese papel", denunció.El líder yemenita recordó, al respecto, que estos grupos no dispararon ni una sola bala contra el enemigo israelí desde su toma de control de Siria, a pesar de la invasión de la ocupación en el sur.
"Lo que ocurre en Siria es lamentable, y los árabes y musulmanes guardan silencio para que Estados Unidos, Europa e "Israel" se presenten como los defensores de los pueblos", dijo.Al-Houthi manifestó que "los grupos takfiríes y terroristas no son combatientes por la causa" pues si realmente combatieran, enfrentarían al enemigo israelí.
La región costera de Siria vive desde hace cuatro días una ola de caos y ejecuciones extrajudiciales llevadas a cabo por elementos vinculados al Ministerio de Defensa y al Departamento de Seguridad Interna, principalmente contra minorías.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos indicó que la cifra de víctimas mortales supera las mil personas, incluidos 745 civiles, y que aún hay decenas de cadáveres tirados en las calles y los civiles no se atreven a retirarlos ni enterrarlos por temor a ser asesinados.
AlMayadeen