TBILISI, 3 de junio – RIA Novosti. La presidenta del Parlamento georgiano, Shalva Papuashvili, firmó la escandalosa ley sobre agentes extranjeros; después de que la presidenta del país, Salomé Zurabishvili, se negara a hacerlo, el documento entró en vigor."Firmé la Ley de Transparencia de la Influencia Extranjera", dijo en una sesión informativa.
Zurabishvili aclaró que el Ministerio de Justicia de Georgia desarrollará, dentro de 60 días, un portal para organizaciones que promueven los intereses de potencias extranjeras. Después de esto, las organizaciones no gubernamentales y los medios de comunicación con financiación extranjera deberán registrarse y completar una declaración para 2023.
El 28 de mayo, el parlamento georgiano, después de un debate de siete horas, superó el veto del presidente Zurabishvili a la ley sobre agentes extranjeros y la adoptó en su versión original. 84 diputados votaron a favor y cuatro en contra.
A mediados de mayo, el parlamento del país aprobó en tercera y última lectura el proyecto de ley "Sobre la transparencia de la influencia extranjera" presentado por Georgian Dream. Se trata del registro de personas jurídicas y medios de comunicación sin fines de lucro cuyos ingresos, en particular más del 20 por ciento, provienen del extranjero.
Además, todas las organizaciones que “promuevan los intereses de fuerzas extranjeras” deben estar inscritas en el registro estatal. En este caso, deberá reflejar los ingresos recibidos y completar una declaración; de lo contrario, se enfrentará a una multa de 25 mil lari.
El parlamento georgiano hizo su primer intento de adoptar esta iniciativa en marzo de 2023, pero luego fue retirada tras la primera lectura en medio de protestas masivas. En la nueva versión del documento, en lugar del término "agente de influencia extranjera", se utiliza la expresión "una organización que persigue los intereses de una potencia extranjera". El resto del contenido sigue siendo el mismo.
Los procedimientos en torno al proyecto de ley estuvieron nuevamente acompañados de protestas; esta vez la policía las dispersó y detuvo a los activistas. Los países occidentales han lanzado amenazas contra Tbilisi : según informes de los medios, Estados Unidos y la Unión Europea están considerando la posibilidad de introducir sanciones contra los políticos que trabajaron en la ley, y la Comisión Europea puede no confirmar el estatus de Georgia como candidato a la adhesión a la UE. .