¿Por qué Estados Unidos financió Pegasus para Colombia?
Fuentes estatales en Estados Unidos, consultadas por El Tiempo, indicaron que la compra de Pegasus busca fortalecer la seguridad nacional, aumentando las capacidades de vigilancia y contrainteligencia en la lucha contra amenazas globales como el terrorismo y el crimen organizado. Este software de alto nivel permite a las agencias de seguridad acceder a dispositivos de forma remota, sin que el usuario esté al tanto, lo que lo convierte en una herramienta eficaz pero polémica. Sin embargo, según estas fuentes, la operación se mantuvo en secreto y solo un reducido grupo de altos funcionarios de seguridad en Estados Unidos y Colombia estaba al tanto de los detalles, debido a la naturaleza sensible de esta adquisición.
La reacción del presidente Gustavo Petro
El presidente Gustavo Petro reaccionó con alarma ante la noticia, publicando en su cuenta de X (antes Twitter): “Si esto es cierto, las cosas serían mucho peores”, en una clara expresión de su preocupación por el impacto que podría tener el uso de Pegasus en la seguridad y privacidad de los ciudadanos. Petro ha sido un fuerte crítico del espionaje y las prácticas de vigilancia intrusivas, y esta revelación profundiza sus preocupaciones, especialmente en el contexto colombiano.
Acusaciones previas sobre Pegasus en Colombia
Este episodio se suma a una controversia anterior en Colombia, cuando en septiembre Petro reveló que había recibido información sobre un posible acuerdo entre el Grupo NSO y la Dirección de Inteligencia Policial de Colombia (Dipol) para la compra de Pegasus. En su discurso, Petro detalló que un banco israelí había registrado un depósito de 5,5 millones de dólares en efectivo, sospechoso por tratarse de un acuerdo por 11 millones de dólares entre NSO Group y la Dipol en 2021. Esta transacción habría tenido lugar durante un período de intensas protestas sociales en Colombia y en vísperas de las campañas electorales, lo que ha provocado inquietud en el país.
La Fiscalía de Colombia Inicia una Investigación
La fiscal general de Colombia, Luz Adriana Camargo, ha anunciado una investigación en torno a la posible compra irregular de Pegasus por parte de las autoridades colombianas durante el gobierno de Iván Duque. Camargo señaló que se convocará a varios altos mandos de la Policía Nacional que operaron bajo su administración, incluyendo a los generales Óscar Atehortúa y Jorge Luis Vargas, quienes ocuparon cargos clave en la estructura de seguridad del país. La investigación busca determinar si hubo abuso de poder o violación de los procedimientos legales en la adquisición de esta tecnología de vigilancia.
¿Cómo funciona Pegasus?
Pegasus es un software de espionaje de última generación que permite a los operadores acceder de forma remota a dispositivos móviles sin la necesidad de que el usuario interactúe o autorice el acceso. Una vez dentro del dispositivo, Pegasus permite monitorear y extraer llamadas, mensajes de texto, correos electrónicos, ubicación, e incluso activar el micrófono y la cámara sin que el usuario sea consciente de ello. NSO Group ha desarrollado técnicas avanzadas para instalar Pegasus mediante el uso de vulnerabilidades en el sistema operativo del dispositivo, enlaces maliciosos enviados por SMS o correo electrónico, o incluso a través de aplicaciones aparentemente legítimas.
Las controversias internacionales y las críticas a Pegasus
El software Pegasus ha sido objeto de múltiples denuncias en los últimos años, particularmente por su papel en el espionaje de periodistas, activistas de derechos humanos, políticos de oposición y otras figuras públicas en diferentes países. Informes de organizaciones como Amnistía Internacional y Citizen Lab han señalado que Pegasus ha sido utilizado para silenciar y monitorear a disidentes en lugares como Arabia Saudita, México, India y Hungría, entre otros. Estos reportes han documentado casos en los que Pegasus se utilizó para infiltrar dispositivos móviles, permitiendo a los gobiernos acceder a datos privados sin el consentimiento de los usuarios. Los críticos sostienen que el uso de Pegasus representa un grave abuso de poder y una violación de los derechos humanos, y que su tecnología está diseñada para facilitar la vigilancia masiva y sin control.