Seis candidatos en la carrera por la presidencia de la República Islámica de Irán dieron a conocer sus planes integrales de bienestar económico y social durante el segundo debate televisivo el jueves.
Por: Alireza Akbari
Fue el segundo de cinco debates que se transmiten en vivo por la Radio y Televisión de la República Islámica de Irán (IRIB, por sus siglas en inglés).La campaña para las elecciones presidenciales anticipadas del 28 de junio ha estado en pleno apogeo y los candidatos no han dejado piedra sin remover para impresionar al electorado con sus planes y manifiestos.
El segundo debate televisado comenzó con las declaraciones del Líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, enfatizando las virtudes de la disciplina y la conducta moral y ética.Como explicó el Líder, el espíritu que define el entorno electoral de la República Islámica contrasta marcadamente con lo que sucede en el Occidente, especialmente las campañas políticas en Estados Unidos.
El segundo debate televisivo en vivo se centró en las hojas de ruta económicas concebidas por los aspirantes a la presidencia para promover servicios sociales enfocados en la justicia, examinando sus propuestas que abarcan la atención médica, la educación y el aparato científico.
El primer debate televisado del lunes se centró en combatir la inflación, impulsar el sector privado, estimular la producción y alentar una mayor participación pública en la esfera económica.El debate de 240 minutos siguió el mismo formato basado en cuatro segmentos distintos.
El segundo debate televisado fue testigo de un cambio menor: tanto los votantes como los expertos en la materia realizaron un examen riguroso de las estrategias propuestas por los contendientes presidenciales.
El primer segmento se centró en el tema de la economía entrelazada con los servicios impulsados por la justicia. Los candidatos en la contienda profundizaron en sus posturas sobre las cuestiones de alivio de la pobreza y gestión de subsidios.
Las consultas durante el segmento inicial giraron en torno a los subsidios, su asignación justa a productores o consumidores y los planes de los candidatos para combatir el flagelo de la pobreza.
Durante los ocho minutos que le fueron asignados, Amir Hosein Qazizade Hashemi, ex legislador y candidato presidencial por segunda vez, apoyó un paradigma anclado en la “destreza nacional”.
Al revelar su agenda, Qazizade Hashemi abogó por la transferencia de activos gubernamentales a la población iraní y propuso “revisiones de la legislación sobre subsidios”.
Citando su trabajo como director de la Fundación de Asuntos de Mártires y Veteranos, el candidato subrayó la restitución de activos a las familias de los mártires y defendió una reforma integral del sector energético para rectificar las disparidades prevalecientes.
Mohamad Baqer Qalibaf, una figura política veterana y presidente del Parlamento, planteó que la responsabilidad de salvaguardar el “poder adquisitivo familiar” recae en el presidente entrante.Al optar por un “desembolso de subsidios centrado en el consumidor” y “incrementos salariales proporcionales” para compensar los picos inflacionarios, Qalibaf defendió la implementación de un sistema integral de seguro de salud y un consumo de energía específico.Mientras tanto, Mostafa Purmohmadi, exministro que también ocupó altos cargos en el Poder Judicial, subrayó el principio cardinal de “justicia” en la distribución de subsidios como eje de la equidad social.Al resaltar el imperativo de empoderar a los sectores marginados de la sociedad, Purmohamadi pidió una prestación de bienestar inclusiva.
Alireza Zakani, alcalde de Teherán y exlegislador, delineó un amplio “paquete de bienestar” para la población iraní que abarca prestaciones sociales y de salud.
Al promover el concepto de un “subsidio de oro” basado en otorgar un equivalente fijo en oro por unidad familiar para obviar las presiones inflacionarias, Zakani imaginó un plan hacia la erradicación de la pobreza a través de medidas prudentes de consumo de energía.
Masud Pezeshkian, exministro de Salud y legislador experimentado, destacó los imperativos del control de la inflación y la conservación de energía a través de iniciativas de educación pública.Al abogar por la implementación cohesiva de las directrices del ayatolá Seyed Ali Jamenei, Pezeshkian pidió un enfoque anclado en “la unidad y la visión colectiva”.
Said Yalili, ex negociador nuclear principal y jefe del principal organismo de seguridad del país, abogó por una asignación juiciosa de recursos y una gestión del consumo libre de corrupción.
Enfatizando la indispensabilidad de un “aparato de bienestar de múltiples niveles” y protocolos anticorrupción sólidos, Yalili trazó un plan basado en la asignación equitativa de recursos y la integridad sistémica.
El segundo segmento del maratón de debate presidencial subrayó el tema central de la reforma de la atención sanitaria y la reducción de costes para los pacientes.
Profundizando en las complejidades de las medidas preventivas, la gestión de recursos humanos y los avances tecnológicos dentro del sector de la salud, los seis candidatos articularon sus visiones para mejorar el panorama de la atención médica del país.
Qazizade Hashemi, médico de profesión, centró su discurso en un cambio de paradigma hacia la atención sanitaria preventiva, abogando por un enfoque que integre “la felicidad y la actividad física” en las rutinas diarias.
Subrayando el acceso equitativo a una atención médica de calidad, especialmente para los estratos marginados, concibió el refuerzo de los sistemas de apoyo para pacientes con condiciones médicas complejas, la creación de una industria de turismo médico y mecanismos para combatir el tráfico de medicamentos.
Qalibaf se hizo eco del sentimiento de que “más vale prevenir que curar”, poniendo de relieve la naturaleza multifacética del sistema de salud que requiere la colaboración entre diversos organismos.Al ensalzar el papel fundamental de una gestión eficaz en la prestación de atención médica, el veterano legislador destacó la distribución estratégica de profesionales médicos en todo el país.
Purmohamadi profundizó en las complejidades de abordar los desafíos de la fuerza laboral de atención médica, particularmente los derivados de la fuga de cerebros, abogando por soluciones que prioricen el respeto por los profesionales de la salud.
Citando el potencial sin explotar dentro del sector de la salud del país, hizo hincapié en la necesidad de un enfoque integral para abordar los problemas relacionados con el envejecimiento de la población, las discapacidades y las enfermedades emergentes.
Zakani, también médico de formación, matizó la importancia de los recursos humanos para reforzar la red de atención sanitaria y describió planes para aumentar la cobertura del tratamiento subsidiado y mejorar los mecanismos de reparto de costes para los pacientes.
Zakani pidió un enfoque dedicado en las políticas de salud impulsadas por expertos y enalteció la necesidad de una planificación lógica y estratégica para impulsar avances en el sector de la salud.
En su discurso, Pezeshkian indicó su trayectoria de desarrollo de infraestructura en atención médica, particularmente en regiones remotas, y su compromiso de hacer cumplir las leyes de atención médica existentes.
Al proponer un camino hacia un mejor sistema de salud, el cardiólogo pudo de relieve la importancia de la implementación de la ley del país para mitigar los desafíos dentro del sector de la salud.A su vez, Yalili elogió los avances en la esperanza de vida tras la Revolución Islámica y presentó una visión para reducir las muertes evitables a un nivel cercano a cero.
Al sugerir distribuciones de subsidios específicas para aliviar los costos de atención médica para la población, Yalili exaltó la importancia de la planificación estratégica y el establecimiento de objetivos para combatir la mortalidad prematura de manera efectiva.
En el tercer segmento del debate de cuatro horas, la atención se centró en la educación y la integración de la industria con la academia para combatir la fuga de cerebros e impulsar al país hacia la excelencia científica.
Los seis candidatos describieron sus estrategias para mejorar y modernizar el sistema educativo del país, promover un marco justo y cultivar fuertes vínculos entre universidades e industrias para fomentar la innovación y el crecimiento económico.
Qazizade Hashemi enfatizó el papel fundamental de la educación en el desarrollo nacional y abogó por un aumento sustancial en el presupuesto del Ministerio de Educación al 30 por ciento.Sus propuestas se enfocaron en racionalizar el proceso educativo, permitir el ingreso temprano de los jóvenes al mercado laboral y fomentar la innovación y las habilidades sociales en los niños pequeños.
Resaltó el potencial de las empresas basadas en el conocimiento para cerrar la brecha entre la academia y la industria, impulsando en última instancia la posición económica del país.
Qalibaf posicionó la educación como la piedra angular del progreso de la nación, haciendo hincapié en la necesidad de reformas significativas dentro del sistema educativo para impulsar la eficiencia económica.
También enfatizó la importancia de un liderazgo estable en la implementación de políticas reformadoras, y describió al Ministerio de Educación como la cartera más importante del gabinete de gobierno.
El candidato ensalzó el papel crucial de las familias y las élites en la configuración del panorama educativo.
Purmohamadi se hizo eco del sentimiento sobre la importancia primordial de la educación y el potencial sin explotar del país en este sector.Llamó a respetar a los docentes y abogó por la unidad como clave para abordar los desafíos dentro del sistema educativo, enfatizando los esfuerzos colectivos para lograr la excelencia educativa.
Zakani subrayó la importancia del sistema educativo, enmarcándolo no como un costo sino como una inversión estratégica en el futuro del país.
Prometió dar prioridad al sector educativo del país, destacando la necesidad de hacer que el conocimiento científico sea práctico y alinearlo con las necesidades de la sociedad.
Haciéndose eco de Qalibaf, Zakani realzó la importancia de un fuerte liderazgo educativo y afirmó que su cartera ministerial más importante estaría dedicada a la educación.
Pezeshkian puso de relieve la igualdad de oportunidades educativas para todas las regiones, enfocándose particularmente en brindar educación de calidad a las áreas desatendidas.
Hizo hincapié en la importancia de dotar a los estudiantes tanto de conocimientos académicos como de habilidades prácticas, y enfatizó la necesidad de que las universidades adapten sus planes de estudio para abordar las necesidades de la sociedad de manera efectiva.
Saeed Jalili resumió su visión educativa afirmando que las escuelas sirven como el principal lugar para generar oportunidades, enfatizando el papel de la justicia en el fomento de la excelencia educativa.
Al reconocer que los miembros del cuerpo docente son invaluables para la nación, Yalili enfatizó el imperativo de que las universidades contribuyan activamente al avance del país mediante el fomento de la innovación y el progreso social.
En el segmento final del debate, cada candidato tuvo la oportunidad de presentar un resumen de seis minutos de sus planes y visiones para el país.
Qazizade Hashemi recalcó el papel fundamental de las “personas y familias” en su gobierno, destacando la importancia del trabajo colectivo y una política exterior sólida para impulsar el crecimiento económico.
También destacó su enfoque en la justicia económica a través de leyes de subsidios específicos, con el objetivo de garantizar la distribución justa de recursos y oportunidades dentro de la sociedad.
Qalibaf posicionó a su gobierno como un escudo de apoyo para el pueblo, abogando por la provisión de programas integrales de bienestar para elevar a la nación.
Purmohamadi describió sus planes para maximizar las capacidades existentes del país y racionalizar el sistema burocrático para una gobernanza más eficiente.Al centrarse en aprovechar eficazmente los recursos actuales e implementar reformas administrativas, adujo que su objetivo será mejorar el desempeño gubernamental y la prestación de servicios al público.
Zakani reiteró el compromiso de su gobierno con sectores clave como la salud, la educación y la educación superior.
Pezeshkian aprovechó su experiencia como exministro de Salud y destacó su dedicación al servicio de los estratos marginados.Yalili puso de relieve la importancia de utilizar el vasto y sin explotar potencial del país basado en principios de justicia para impulsar a la nación hacia adelante.
El resumen de cada candidato reveló sus visiones y prioridades únicas para el país, que van desde el crecimiento económico y el bienestar social hasta la eficiencia administrativa y la justicia, ofreciendo a los votantes una comprensión integral de sus agendas propuestas para el futuro.
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