BUENOS AIRES (Sputnik) — La defensa de la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015) presentó un recurso de queja ante la Justicia para que se le conceda una prórroga a su clienta, que debía presentarse ante tribunales en el marco de la causa que investiga la venta de dólar a futuro durante su gestión.
Fernández de Kirchner fue citada este 25 de noviembre para un “informe socioambiental” (sobre sus datos laborales, crediticios, etc.) y para registrarle las huellas dactilares, un trámite que realizan todos los procesados que están cerca de ir a juicio oral. “Si el juez, sin causa legal ni riesgo procesal alguno, ordenara traer a mi representada por la fuerza pública, habrá de consumar una privación ilegal calificada”, advirtió su abogado. El juez Claudio Bonadío había rechazado el pedido de prórroga que había presentado esta semana la exmandataria, quien solicitó que el trámite se realizara en Rio Gallegos, capital de la provincia de Santa Cruz (sur). >>> Política, historia, economía, arte, literatura y mucho más en Librería Popular “Parece mentira que un juez federal con la enorme importancia que tienen los casos a su conocimiento pierda el tiempo y se lo haga perder a los demás con comportamientos caprichosos que lamentablemente se siguen perpetuando sin que nadie, de manera efectiva, ponga coto a semejantes desvíos”, añadió la defensa en su escrito. Además de la “ilegalidad de la carga impuesta” a la exmandataria de tener que viajar más de 5.000 kilómetros, se le añade una arbitrariedad más: “No aceptar ni siquiera una simple postergación por un plazo de tan sólo 72 horas hábiles”, cuestionó el abogado. El juez Bonadío emitió el jueves una resolución en la que intimaba a la expresidenta a presentarse en los tribunales “bajo apercibimiento en caso de incomparecencia inmotivada”. Días atrás, la defensa de la exjefa de Estado decidió no apelar el procesamiento ratificado por la Cámara Correccional y Criminal Federal y pidió que el caso fuera elevado rápidamente a juicio oral, lo que también fue rechazado por el magistrado, que consideró “impertinente” el planteo.