La información publicada del contrato entre la empresa Google y el Departamento de Defensa de los Estados Unidos, para proveer en drones de las fuerzas armadas la inteligencia artificial al servicio bélico, puso en alerta a sus empleados y la sociedad en general. En un contexto previo en donde las empresas Facebook y Cambridge Analytica se vieron involucradas en robo de datos de sus usuarios para la campaña electoral de Donald Trump, Google sale al ruedo con siete principios éticos. ¿Será creíble?
